miércoles, 2 de mayo de 2007

EL CURIOSO INCIDENTE DEL PERRO A MEDIANOCHE





“El curioso incidente del perro a medianoche” es una novela de Mark Haddon. La verdad es que es una novela muy recomendable, que ha recibido el Premio Whitbread y el premio de la Commonwealth al mejor primer libro. Además es ameno, de fácil lectura y no es largo (268 páginas).

Como toda buena novela de detectives, comienza con un misterioso asesinato. El perro de la señora Shears ha aparecido muerto, atravesado con una horca. El cuerpo lo descubre Christopher Boone, un autista de 15 años enamorado de las matemáticas y de las novelas de detectives. Christopher tiene problemas para entender las metáforas, pero se sabe todos los países del mundo con sus capitales, puede explicar la teoría de la relatividad y recitar los números primos hasta el 7507, pero le cuesta relacionarse con otros seres humanos. Le gustan las listas, los esquemas, la verdad, el color rojo, pero odia el amarillo, el marrón y el contacto físico. Si bien nunca ha ido solo más allá de la tienda de la esquina, al día siguiente, al ir al colegio, ve pasar cuatro coches rojos, lo que implica que será un día bueno, y decide que comenzará una investigación para averiguar quien ha matado al perro. Y averiguará muchas más cosas de las que esperaba. Imitando a su admirado Sherlock Holmes -el modelo de detective obsesionado con el análisis de los hechos-, sus pesquisas lo llevarán a cuestionar el sentido común de los adultos que lo rodean y a desvelar algunos secretos familiares que pondrán patas arriba su ordenado y seguro mundo.

Seguramente las cualidades de Christopher os recordarán un poco a la película Rain Man
. De todas formas aunque "Rain Man" y "el curioso incidente del perro a media noche" tengan como protagonistas a un autista y a Christopher que padece el síndrome de Asperger su parecido no pasa de ahí.

La inteligencia que posee Christipher se demuestra en varias partes del libro. Plantea, por ejemplo lo que él llama el problema de Monty Hall. Supón que estás en un concurso televisivo, en el que te hacen elegir una de 3 puertas, detrás de las cuales hay 1 coche en una de ellas, y sendas cabras en las otras dos. El objetivo, por supuesto, es conseguir el coche. Te hacen elegir una de ellas, y abre otra, en la que hay una cabra, entonces se te da la oportunidad de cambiar de puerta, ¿qué debes hacer?. Bueno, pues aquí os va la demostración de que lo mejor es cambiar de puerta, ya que tienes un 66,66 % de posibilidades de conseguirlo.


Christopher nos cuenta maravillosamente su forma de ver y entender el mundo, alternando junto a ello capítulos de su particular investigación sobre la muerte del perro y los hechos en que desemboca el descubrir la verdad. Con él descubrimos qué hacer para comer una comida que es de un color que no te gusta, cómo aplicar la Dialéctica de una forma tan lógica que los demás se ven obligados a castigarte por no poder salir de una trampa verbal que ni siquiera sabes que les has tendido, y cómo el día a día de las personas cotidianas puede resultar completamente extraño y anormal si se mira desde una perspectiva distinta a la considerada habitual.

Solo es capaz de distinguir alegría y tristeza en las caras de las personas, pero no la infinidad de expresiones que aparecen en las personas. Y es que Christopher es un joven genio con un leve defecto que le impide pensar de forma abstracta, limitando su raciocinio a lo concreto, y haciendo que su forma de relacionarse con el mundo sea vista como algo extraño por los demás.



La lectura de este libro me ha hecho darme cuenta de que no todos vemos el mundo de la misma manera. Es una historia conmovedora y divertida a la vez. Os la recomiendo, es rápida de leer, amena y te hace pensar.

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